jueves, 4 de agosto de 2011

Sirviendo con el corazon correcto

Una gran parte de la Vida Cristiana es; escuchar los problemas de los demás, ayudar a otras personas, mostrar misericordia a personas en necesidad, Servir aun cuando no seamos reconocidos o premiados por ello, donar sangre, jugar con niños, cuidar personas mayores,ext. Así es como crecemos en Santidad, así es como mostramos el amor de Cristo, así es como cultivamos paciencia y misericordia.

Fue Pablo citando a Cristo que dijo; “Dios bendice más al que da que al que recibe.” Dios valora más cuando damos a otras personas, que cualquier beneficio que recibamos.

Nosotros leemos un libro o escuchamos un sermón y no hacemos nada con eso. Tenemos que practicar lo que creemos. En mi experiencia, a mi me encanta la lectura pero los beneficios que he visto cuando hago una actividad de servicio sacrificial como; Donar sangre, ayudar a construir una iglesia, predicar el evangelio o repartir sillas de ruedas son mucho mayores. Estas son actividades que me han ayudado a mostrar amor por otras personas, a crecer en paciencia, a crecer en consideración y a ayudar a personas en necesidad.

Yo encontré estas citas del autor Kent Hughes en su libro “Las disciplinas de un hombre piadoso” que hablan sobre el corazón que debemos tener para servir;

“Hay dos sendas que podemos escoger en la vida. Una es cultivar un Corazón pequeño, esta parece ser la vía más segura para tomar porque minimiza las aflicciones de la vida. Si todo lo que usted ambiciona es evadir los problemas de la existencia humana, la formula es sencilla; Evite las relaciones complicadas, no se dé a los demás y asegúrese de no abrazar con seriedad ideales nobles y elevados.”

“Cultive la sordera y evitara escuchar las injusticias de la vida. Cultive la ceguera y no verá el sufrimiento ajeno. Así es como la mayoría de las personas, aun las que profesan ser cristianas van por la vida sin acarrearse problemas son las que han cultivado con éxito la pequeñez de Corazón.”

“Ensanche su Corazón, Cultive su corazón, disciplínese para el servicio y ensanchara su experiencia del dolor. Los efectos de estos dos tipos de Corazón son drásticamente diferentes. Los Corazones pequeños aunque están a salvo y protegidos, no hacen nunca ninguna contribución. Nadie se beneficia de su limitada visión y simpatía."

“Por otra parte los otros corazones que han cultivado la disciplina del servicio-aunque son vulnerables-Son los que disfrutan de las mayores alegrías y que dejan su huella en el Mundo. Cultivemos la sordera y nunca escucharemos las injusticias, pero tampoco oiremos los gloriosos acordes de una sinfonía. Cultivemos la ceguera nunca veremos el sufrimiento pero tampoco veremos la belleza de la Creación de Dios.”

Recuerda la actitud correcta es una que busca con alegría las oportunidades de servir a los demás.

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